Hemos conseguido lo impensable: reformar la artesanía del jamón ibérico con una tecnología vanguardista. Recordamos con cariño los inicios: todo comenzó hace más de 70 años cuando los antepasados dieron origen a lo que hoy en día es Lisardo Castro. Pasado el tiempo, la superación constante y el compromiso con la calidad han estado presentes y hasta hoy tradición y sabiduría se han sabido transmitir de generación en generación formando esta gran familia.

En Guijuelo, cuna del jamón ibérico, gracias a su microclima continental tenemos un control íntegro de los procesos de elaboración de los jamones, paletas y embutidos procedentes del cerdo ibérico. Somos una empresa innovadora y pionera en la utilización de tecnología punta para mejorar e incrementar la seguridad alimentaria en el mundo del ibérico.

Para lograr el mejor jamón ibérico y los mejores embutidos debemos conseguir la mejor materia prima. En Lisardo Castro trabajamos con ganaderos de confianza y elegimos los mejores cerdos de raza ibérica los cuales provienen de las extensas dehesas extremeñas y andaluzas.

Allí los animales son criados en libertad, alimentándose de cereales naturales y en los meses de montanera únicamente de bellotas, pastos y agua fresca. Obteniendo así una carne con mejor textura y mejor infiltración de grasa saludable.